Mediante una carta publicada en el diario El Mercurio, Isabel Luco señala: “Ha sido un año de dolor, de silencio desmedido... de ausencia”. Asimismo agrega que también ha sido un año de mucho amor y generosidad.
Este domingo se cumplió un año desde el sensible fallecimiento de la hija mayor de Vicuña y Carolina “Pampita” Ardohain a causa de una neumonía hemorrágica por lo que tuvo que ser operada.
Esta es la carta publicada por Isabel Luco.
Blanca Vicuña Ardohaín
Señor Director:
Ayer domingo 8 de septiembre se cumplió un año desde que nos dejó nuestra maravillosa niña de apenas seis años de edad.
Ha sido un año de dolor, de silencio desmedido... de ausencia. Un año en que el tiempo se detuvo para transportarnos a un viaje vertiginoso por preguntas, divagaciones y extravíos. Pero también un año de mucho amor y generosidad, en que hemos podido conocer la bondad del ser humano, su comprensión, su entrega.
Quiero, a nombre de toda mi familia, a nombre mío y de la Blanquita, dar las gracias infinitas a todos los que han tenido una palabra de apoyo, un abrazo, una sonrisa, un gesto de aliento, para ayudarnos a enfrentar día a día el vacío de su triste partida.
ISABEL MARGARITA LUCO.

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