Caso Rawson: El escabroso relato del taxista que podría complicar al portero

Mientras el juez Javier Ríos decide hoy si confirma el procesamiento de Jorge Mangeri, el único imputado por el crimen de Ángeles Rawson, un nuevo testigo complica aún más al encargado del edificio de Ravignani 2360. El testigo declaró entre seis y siete horas ayer por la tarde frente a detectives de la División Homicidios y, luego, frente al juez de instrucción y la fiscal María Paula Asaro, antes de la inspección ocular que fue realizada anoche en el edificio, y volvió a Tribunales hoy para reafirmar su testimonio.

Ayer, un chofer de taxi se presentó ante la Fiscalía y aseguró que el lunes 10, el mismo día en que desapareció la adolescente, transportó al portero hasta el CEAMSE, adonde habría depositado bolsas. El hombre explicó que no se había presentado antes porque estaba atemorizado y no se lo permitía el dueño del taxi.

El hombre, quien manejaba un taxi Volkswagen Polo, dijo que recordó lo ocurrido al ver el 11 de junio, es decir, el día del hallazgo del cadáver de Angeles, las imágenes por televisión, y se lo contó a su familia.

Según consignó Télam, en base a informaciones proporcionadas por fuentes judiciales, el taxista relató que el lunes, cerca de las 14.30, circulaba por Ravignani al 2300 por mano izquierda. De acuerdo con ese relato, un hombre salió de entre los autos estacionados, le hizo señas para detenerse y le pidió un viaje. El hombre le dijo que tenía que cargar dos bolsas para llevar hasta el CEAMSE, en Colegiales, una más pesada que la otra.

Si bien el conductor explicó que no quería hacer el viaje, el pasajero -supuestamente, Mangeri- le ofreció poner un plástico en el baúl para no ensuciarlo y, finalmente, accedió.

Según este testimonio, como el taxista no podía hacer fuerza porque tiene un problema de cadera, el portero le habría pedido ayuda a unos transeúntes que pasaban por el lugar para cargar las bolsas y, luego, le habría pedido que lo traslade hasta el CEAMSE, en Colegiales.

Al llegar al predio, detuvo la marcha, pero el pasajero lo hizo entrar al lugar, a pesar de que el acceso está prohibido. En ese momento, salió al cruce un empleado de seguridad, aunque el pasajero se bajó y comenzó a conversar con éste, tras lo cual le hicieron poner el auto de culata y abrió el baúl para descargar las bolsas.

Según contó el taxista, el contenido de una de esas bolsas se movió. Mangeri habría dicho que se trataba de un perro atropellado, y pidió a los empleados del CEAMSE algo para golpearlo. "Le trajeron una maza, de mango corto pero de martillo grande. Mangeri lo garroteó", dijo el taxista a los investigadores.

Luego, el encargado le entregó dinero a quienes lo ayudaron y le solicitó al taxista que lo llevara nuevamente hasta el edificio de Ravignani al 2360, dijo el testigo, quien agregó que el baúl de su auto había quedado manchado con sangre, pero que lo había lavado.

Verosímil. El auto Polo fue entregado ayer a los investigadores y peritos de la Policía Científica comenzaron a trabajar en busca de rastros. En tanto, la División Homicidios de la Policía Federal revisa los videos de la causa para intentar detectar el paso de este taxi Polo por los lugares de los hechos, especialmente, la grabación del edificio de Ravignani 2330 -ubicado a pocos metros del edificio donde vivían Ángeles y Mangeri-, para ver si el auto aparece entre las 14 y las 15, como declaró el testigo.

El abogado Roberto Casorla Yalet afirmó a Télam que él fue quien al enterarse de los dichos de este taxista, lo mandó a declarar a Tribunales. "Conozco a un familiar de este hombre que me llamó para contarme lo que había vivido y ayer mismo lo mandé a declarar", dijo el abogado.

El letrado aseguró que el relato del testigo "no tiene fisuras" y que por lo que sabe, el juez y la fiscal "lo tuvieron declarando ayer entre seis y siete horas".

"Este hombre sólo tiene la intención de ayudar y no aguantó más la presión de saber que quizás él fue quien llevó el cuerpo de Ángeles hasta el predio del CEAMSE", afirmó el abogado.

Casorla Yalet también explicó que el taxista "tardó en presentarse a declarar porque tenía mucho miedo y porque el propietario del taxi le dijo que esperara porque iba a consultar con abogados".

Fuente: Perfil 

Foto: Telam