La justicia falló sobre la muerte de Whitney Houston

La policía de Beverly Hills ha cerrado la investigación sobre la muerte hace dos meses de la cantante Whitney Houston en el baño de la habitación de un hotel tras concluir que no hubo ningún crimen y que el motivo de su muerte fue una caída accidental en la bañera.

   "Basándonos en los hallazgos de nuestra investigación y en la revisión del informe forense, determinamos que no es un caso criminal", afirmó en un comunicado el departamento policial de Beverly Hills. "La investigación ha sido oficialmente cerrada", anunció.

   Houston, de 48 años, tenía una larga historia de abuso de drogas, fue hallada muerta el 11 de febrero, y previamente un informe del departamento forense del condado de Los Angeles afirmó que había muerto ahogada accidentalmente debido a los efectos del consumo de cocaína y de un fallo cardíaco.

   Un comunicado de la policía dijo que los detectives "no hallaron pruebas de delito" pero no trataron el tema del abuso de drogas.

   El informe final forense publicado la semana pasada dijo que se halló polvo blanco, junto con una cuchara, un espejo y papel enrollado, en el baño del hotel Beverly Hilton donde murió Houston horas antes de la fiesta previa a los Grammy, a la que debía asistir.

   La sustancia no fue identificada en el informe del forense, pero las autoridades previamente dijeron que había evidencias de que Houstonconsumiera cocaína poco antes de sumergirse bajo agua extremadamente caliente. Un portavoz de la policía de Beverly Hills declinó el miércoles hacer comentarios sobre si el polvo blanco era cocaína.

   El cuerpo sin vida de Houston fue encontrado por un asistente boca abajo en la bañera después de que se quedara sola durante cerca de una hora, afirmó el informe del forense.

   La cantante también tenía restos de marihuana en su sistema así como de medicamentos recetados para la ansiedad y la alergia, y se encontró en su habitación una botella de champán.

   Houston fue una de las cantantes más famosas del mundo en los años 80' y 90' con sus éxitos I Will Always Love You y Saving All My Love For You. Sin embargo, su carrera se vino abajo durante sus 15 años de matrimonio con el cantante Bobby Brown, que estuvieron marcados por la droga.

   Había entrado por última vez en rehabilitación en mayo de 2011 pero medios sobre famosos informaron que había sido vista bebiendo en exceso y comportándose de modo errático tres o cuatro días antes de su muerte.